Tras una larga lucha contra la enfermedad se nos fue la compañera Magdalena Morales, secretaria departamental de la Central Nacional de Trabajadores del Campo (CNTC). Mujer digna y valiente, luchadora incansable, defensora de los derechos de las y los campesinos.

En 2013 sufrió en su propia piel la persecución, criminalización y violencia judicial del ingenio Azucarera del Norte SA (Azunosa), propiedad de la transnacional británico-sudafricana SABMiller, que en Honduras controla también la Cervecería Hondureña SA y posee la franquicia para producir Coca Cola.

Magdalena fue detenida, encarcelada y puesta a la orden de una jueza. Finalmente, la jueza dictó medidas cautelares sustitutivas a la prisión hasta el 22 de agosto, cuando se celebrará la audiencia.

2016 ta nos trajo mucho dolor, muchas ausencias. Pero también nos ha traído ejemplos de vidas que SI que valieron la pena vivir. Magdalena, como Berta, no muere hoy: se multiplica en todas las luchas que vendrán. ¡HASTA SIEMPRE MAGDALENA!