La pandemia de Covid-19 ha blindado unas fronteras ya de por si muy complicadas, este cierre ha reactivado la apertura de rutas todavía más peligrosas para las personas migrantes.

Es el caso de la ruta canaria que, junto a las políticas migratorias asesinas impulsadas por la UE, se ha cobrado la vida de al menos 1.851 personas el año pasado.

Desde 2016, los movimientos sociales han organizado cada año una caravana que cruza diferentes zonas fronterizas con el objetivo de denunciar la violación de los derechos humanos, las causas de los desplazamientos forzados y otras políticas migratorias, comerciales e internacionales.

La caravana «Abriendo fronteras» viajará junto a Carovane Migrante este verano durante 8 días para visibilizar y denunciar las violaciones de derechos fundamentales de las personas en tránsito, acompañar y tejer redes de solidaridad con las personas y colectivos que se encuentran en las Islas Canarias y seguir reclamando el derecho a la movilidad humana.

En la caravana participarán más de 200 personas, el 40% del País Vasco, y todavía hay algunos lugares libres para participar. Para saber cómo se están organziando, qué harán y con quién se encontrarán, hablaremos con Arantza Gutiérrez, miembro de Ongi Etorri Errefuxiatuak.